En el año 2006 se decretó la ley 18.059 que establece el 3 de diciembre como día del Candombe, la Cultura Afrouruguaya y la Equidad Racial. Esta acción refleja parte del resultado de una lucha histórica del colectivo afro por sus derechos y reconocimiento, además de contribuir a la valoración y promoción de la población afrodescendiente en la conformación de la identidad cultural de nuestro país.

Se toma esa fecha ya que el 3 de diciembre de 1978 se realizó la última llamada en el conventillo Mediomundo en barrio Sur, condenando el desalojo compulsivo realizado por la dictadura civil militar para su demolición en el marco de un proceso de gentrificación.

Uruguay es uno de los países de Latinoamérica con más temprana aparición de activistas afro. Uno de ellos trabajó en el Museo Histórico Nacional: Elemo Cabral. Cabral perteneció a colectividades y asociaciones negras de intensa labor en el periodismo, la cultura y la política de nuestro país entre 1920 y 1960.

Elemo integró el Círculo de Intelectuales, Artistas, Periodistas y Escritores Negros (CIAPEN) fundado en 1935. Fue director durante 15 años de la Revista mensual Nuestra Raza, autodenominada en sus orígenes: “órgano de la comunidad de color” (1917). Entre 1933 y 1948 con este cargo, editó 181 números junto a Ventura y Pilar E. Barrios. 


Nuestra Raza: Órgano de la colectividad de color. (1937). Vol. IV (44). Montevideo.

Nuestra Raza: Órgano de la colectividad de color. (1938). Vol. V (61). Montevideo.

La base del accionar editorial se centró en el compromiso ideológico y político con negritud a nivel nacional e internacional. A la vez se realizaban distintas acciones contra la exclusión, la discriminación, el prejuicio, el racismo y el despotismo.

Nuestra Raza fue también plataforma para la difusión de ideas y proyectos de representación. En 1936 surgió el Partido Autóctono Negro (PAN), con Elemo Cabral como uno de sus miembros fundadores y principales impulsores. Entre las reivindicaciones principales aparecen aspectos ligados a lo cultural, al ascenso social, culturales, reivindicativos y la expectativa de lograr un representante en la bancada nacional. 

Elemo Cabral también se centró en el reconocimiento del papel del colectivo afro en la construcción del relato nacional e identitario en el marco del Centenario (1925-1930), y la reivindicación de la figura de Ansina como ‘soldado artiguista’, fundamental en el proceso revolucionario.

En la segunda imagen se ve la portada de La Música en el Uruguay, libro de Lauro Ayestarán que recoge aportes fundamentales para el estudio del candombe. Si bien sus investigaciones abarcaron la música llamada “culta” (de origen europeo), también incursionó en el estudio de la música popular, incluyendo la de origen indígena y afro. Muchos de estos trabajos fueron realizados en calidad de funcionario del museo. 

La música en el Uruguay. Lauro Ayestarán. Vol I. Montevideo, 1953.

En el Museo Histórico Nacional conservamos varios ejemplares de Nuestra Raza, documentos personales sobre Elemo Cabral y la publicación de Ayestarán antes mencionada. Este tipo de documentación nos permite conocer la opinión y los aportes culturales de determinados sectores sociales cuya voz ha estado silenciada durante décadas.