Roberto J. Bouton nació en Montevideo el 23 de mayo de 1877. Era hijo de Julio Bouton, un traductor público, y de Francisca Dubois.
Desde pequeño se vio familiarizado con la vida del campo, ya que tras la muerte de su padre en Paraguay, solía pasar largas vacaciones en un establecimiento propiedad de su tío Manuel Acosta y Lara. Aquellas instancias fueron generando en el niño un gusto particular por las “cosas” y tradiciones de la campaña uruguaya, iniciándose de esa manera en el coleccionismo. De su niñez y adolescencia son algunos de los objetos presentes en su colección, que hoy es custodiada por el Museo Histórico Nacional. De sus vacaciones dan cuenta muchos de los relatos acerca de antiguas tradiciones y trabajos rurales.
Bouton cursó la enseñanza secundaria en Montevideo hasta iniciar en el año 1902 los cursos en la Facultad de Medicina. Un año más tarde decidió abandonar la carrera y radicarse en la estancia de Ramón Peyralló en Florida, donde desarrolló distintas tareas rurales además de continuar profundizando en su conocimiento e incrementar su colección de objetos. De esta época son gran parte de los recuerdos que aparecen en sus manuscritos, que dan cuenta de la vida del joven Bouton en la zona de Florida.
A raíz de sus frecuentes estadías en el campo y el vínculo con sus habitantes, aprendió diversos oficios rurales. Además del manejo de ganados, sabemos por su colección, de su pericia en la fabricación de algunas artesanías en cuero y madera.
En 1908 decidió continuar sus estudios de medicina, culminándolos en 1912. Un año más tarde le fue entregado el título, y meses después se radicó en Santa Clara de Olimar, departamento de Treinta y Tres. El doctor Bouton permaneció en la zona hasta 1931, desarrollando activamente su profesión entre todos los vecinos. En 1916 contrajo matrimonio con Gabriela Trouy.
Su radicación en el interior, significó una oportunidad para continuar acrecentando su colección de objetos vinculados a los trabajos y tradiciones rurales. Por esos años adquirió un campo en la zona de El Cordobés y arrendó unas quinientas cuadras en la zona de Pablo Páez, dedicándose principalmente a la ganadería.
Bouton y su esposa participaron en la vida pueblerina, colaborando e involucrándose activamente en todas sus actividades. Desde el punto de vista político simpatizó con el Partido Colorado, según confiesa en sus manuscritos.
En 1931 y aquejado por una enfermedad terminal, Roberto Bouton y Gabriela Trouy decidieron radicarse en Montevideo, donde había familiares del médico que vivían en el Prado. El matrimonio adquirió una casa que de alguna forma buscaba rememorar la vida en los "pagos” de Santa Clara de Olimar, donde no faltaban sus chajás, teros, gallos de riña y perros.
De su estadía en Montevideo, son sus apuntes manuscritos (más bien dactilográficos, intitulados Bien Criollo, donde apremiado frente a la vida que se marchaba recuerda buena parte de sus vivencias personales e ilustra sobre todo lo que tiene que ver con la vida rural (costumbres, recreación, creencias, utillaje, herramientas, vestimenta, alimentación, entre muchos otros).
