En el marco de la exposición “Hemos visto una maravilla. Inicios de la fotografía en Uruguay (1840-1860)”, el pasado sábado 19 de octubre se desarrolló una demostración de la antigua técnica fotográfica, que empleaba el colodión húmedo (nitrato de celulosa disuelto en alcohol y éter), tanto en el procedimiento de toma como en el revelado de las imágenes.
La actividad estuvo a cargo del fotógrafo Luis Sosa, especializado en la investigación de las primeras materias y soportes fotográficos que incluyen daguerrotipos, ambrotipos, y ferrotipos, entre otros.
Luis Sosa, fotógrafo especializado en técnicas fotográficas antiguas, realizando una introducción teórica sobre el tema. Foto: Ana Cuesta / MHN
En una soleada tarde de fin de semana, en el patio de Casa Lavalleja, unas veinte personas aprox. pudieron acercarse al tema desde un punto de vista teórico y práctico.
La propuesta incluyó una introducción explicativa sobre el surgimiento y las características de la técnica fotográfica al colodión, que se llevó a cabo utilizando ejemplos históricos y contemporáneos, componentes de la colección personal de Sosa. 
Público participando de la observación de imágenes invertidas en cámara de fines del siglo XIX. Foto: Ana Cuesta / MHN
Público observando fotografía durante el proceso de fijado de la toma. Foto: Ana Cuesta / MHN
Aplicación de Colodión Húmedo a una placa de vidrio para el registro de una imagen. Foto: Ana Cuesta / MHN
A continuación, se planificó una primera toma fotográfica desarrollada con una cámara de segunda mitad del siglo XIX. El encuadre comprendió una vista de ventanas y plantas de la casa museo, que los participantes apreciaron de manera invertida tras una tela negra, a modo de espectáculo.
Posteriormente, en el laboratorio y al aire libre, se preparó una placa de vidrio con la emulsión sensible a la luz, para finalmente colocarla en la cámara oscura. Se calculó el tiempo de exposición y se realizaron un par de pruebas con más de un minuto de duración. 
Revelado de la placa en el laboratorio, montado en Sala auditorio de Casa Lavalleja. Foto: Ana Cuesta / MHN
Luego, se ingresó al cuarto oscuro para revelar la imagen obtenida. Este momento en que asomaron las figuras y se hicieron presentes, fue vivido como un instante mágico por el auditorio general. Afuera, se completó el proceso mediante el fijado, lavado y escurrido de la imagen. 
Lavado y etapa final en la obtención del ferrotipo. Foto: Ana Cuesta / MHN
La segunda imagen se instrumentó en el primer patio del edificio, enfocando el histórico árbol de plátano, los azulejos y el piso de damero. Mientras que la última toma, se realizó sobre un soporte metálico, dando lugar a un ferrotipo cuya estampa comprendió al colectivo de personas asistentes al taller.
La propuesta despertó gran interés y fue evaluada de manera muy positiva por quienes la vivenciaron. “Para muestra basta un botón”, así que, los invitamos a observar una serie de instantáneas tomadas durante aquella jornada.
Por último, queremos invitarlos a seguir participando en el ciclo de visitas dialogadas y actividades educativas asociadas a esta exposición. Y si se trata de grupos, no se olviden de comunicarse para agendar un recorrido, escribiendo a educativa@mhn.gub.uy
¡Los esperamos!
